Conocí a Enrique Peña Nieto como candidato a la gubernatura del Estado de México hace más de 6 años. Yo era co-conductor de "Viva la mañana" y el "Golden Boy" acudió a una entrevista con Alfredo Adame. Ahí conversé algunos minutos con el político, a quien volví a ver meses después, ya como Gobernador. El segundo encuentro se dio también en las instalaciones de Televisa Chapultepec, a donde el Señor acudía constantemente. Fue amable y cordial en las dos ocasiones y de hecho agradeció el apoyo que le habiamos brindado en el programa matutino.
La realidad es que yo apenas tenía conocimiento de quién se trataba y en ambos momentos Peña Nieta lucía radiante, impecablemente vestido con trajes que supongo eran Hugo Boss o Armani y corbatas contrastantes y muy bellas, además de su inconfundible copete engominado. Con el paso del tiempo, fui descubriendo que detrás de este simpático, elegante y guapo personaje, se escondía un hombre vacío, abyecto, simplón, inculto y hasta pendejo. Eso sin contar con "la mafia del poder" que corrompe, que asesina y que quiere volver a los Pinos a como de lugar.
Los últimos resbalones del político de Atlacomulco dejan ver la cruda realidad que envuelve a este "títere". Confundir autores y libros le pasa a todo mundo, sin embargo, la cosa toma relevancia por tratarse de un pre-candidato a la Presidencia de la República y eso no es poca cosa. Con ello, el político de escasa trayectoria (Apenas 12 años en el servicio público, según la revista Proceso), desnudó lo que ya muchos habían gritado a los cuatro vientos: que detrás de él se encuentra gente muy poderosa como Carlos Salinas y otros dinosaurios del PRI y que sólo es un "pelele" producto de la publicidad, que ni pronunciar el inglés sabe.
Peña Nieto es un inculto, "un ignorante" como le llamó el gran Carlos Fuentes, por haber confundido una de sus obras, pero no sólo eso, yo creo que también se trata de un pobre pendejo sin carisma ni liderazgo. Y es que bien lo ha mencionado Jenaro Villamil en su libro "Si yo fuera presidente, el reality show de Peña Nieto", que el sobrino de Montiel no es nada sin apuntes, sin textos dichos de memoria, sin asesores ni lacayos, sin telepromter, sin apuntador y sin sus "cuates" del medio. Enrique Peña Nieto no es nada sin Televisa. Y es que no le bastó mostrar su incultura en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, sino que hizo lo mismo en el periódico "El País" de España, en el cual no supo de a cuánto es el salario mínimo en México, ni el precio de los productos de la canasta básica. ¿Este arrogante que desconoce la realidad del país, pretende gobernar México y a los mexicanos? ¿Este "manipulable" personaje, cuya hija nos llamó proletarios y pendejos, quiere regresar el PRI a los Pinos?
Ernesto Zedillo, Carlos Salinas y Miguel de la Madrid, podrán haber sido malos presidentes y lo fueron, de hecho, sin embargo, eran hombres cultos, leídos y "escribidos", dijo aquel. Sin embargo, el "suspirante" del PRI, no sólo no sabe nada debido a su poca afición por la lectura y a su falta de inteligencia, sino que además no tiene capacidad de improvisación, ni de análisis, ni credibilidad, ni nada de nada. Mira que olvidar los libros que marcaron tu vida y es que si la marcaron por algo será, a menos que nunca hayas leído ni el Libro Vaquero. Lo dice la Biblia, que según el candidato leyó mucho en su adolescencia, que la verdad nos hará libre. ¿Y cómo se adquiere la verdad?... Leyendo, sabiendo, enterándote.
Enrique Peña Nieto es un producto de la mercadotecnia, de la publicidad, del marketing. Ya lo dijo Denisse Dresser hace algún tiempo, que se trataba del candidato de "El Canal de las Estrellas" donde amigos como López Dóriga y Loret de Mola, lo defenderán en pantalla y fuera de ella por la simple y sencilla razón de que ellos reciben órdenes y hay que cuidar al mejor cliente de la política que ha tenido Televisa y que responde al nombre de Enrique Peña Nieto. Según Villamil, en cuatro años, el ex gobernador del Estado de México gastó más de 3 mil 500 millones de pesos en autopromoción. Dinero del erario público, dinero de México y los mexiquenses.
Pero lo ocurrido a Peña Nieto en los últimos días no es nuevo, ya desde hace varios años quedó en evidencia su ineptitud e ineficacia al ser entrevistado por uno de los mejores periodistas que ha dado México, Jorge Ramos, conductor del noticiario más importante de habla hispana en Estados Unidos. En entrevista en mayo de 2009, Peña Nietó olvidó las causas que llevaron a la muerte a su primera esposa, Mónica Pretelini el 11 de enero de 2007. Esto alimentó más los rumores que señalan al Candidato como el principal sospechoso de su deceso, a decir de sus detractores y opositores, como la diputada panista, María Elena Pérez, del Estado de México.
Lo que si está claro es que el caso de Enrique Peña Nieto, es único y anómalo, como lo calificaría Carmen Aristégui. Jamás en la historia de los medios en México, un político había sido tan promocionado (3 mil 400 impactos en radio y televisión, tan sólo para promocionar su V informe de Gobierno). Esto, ha llevado a levantar suspicacias y le ha dado elementos y armas a adversarios como Andrés Manuel López Obrador, quien no se ha cansado de repetir a los cuatro vientos que detrás del Priísta se encuentran Montiel, Del Mazo, Salinas, Televisa y varios más.
Se especula también que hasta su boda de telenovela con la "Gaviota", Angélica Rivera, fue un montaje para colocar al "Golden Boy" en la preferencia del público y es que no sólo en los programas de política y análisis se habla del Mexiquense..., emisiones del corazón, revistas de sociedad y shows de espectáculos, dan cuenta de la vida íntima de la "pareja perfecta", la cual se pudo casar ante Dios, previo anuncio en el Vaticano teniendo como testigo al mismísimo Papa y haciéndo inválido el matrimonio de la actriz con el "Güero" Castro (Hermano de Verónica Castro). Se trata de un hombre conservador, pero más que eso, hay quienes lo tachan de misógino ("Yo no soy la Sra, de la casa"), y homofóbico...
Yo sólo le pido a Dios que nos agarre confesados, porque el regreso del PRI al gobierno es lo peor que le podría pasar a México y más aún, con un tipo "maleable" como Peña Nieto y toda la obscuridad que se esconde detras de él. Porque hemos consumido un producto vacío, sin contenido ni fondo, una marca como la Coca Cola, que de tanto anunciarse, de tanta promoción y publicidad, aunque no lo quieras, te la tomas. ¿O no?
¿Qué pesará más en 2012, en un país que se va más por la forma que el fondo? ¿Las irregularidades del caso Paulette? ¿Las casi 1000 muertas y el crecimiento de la miseria y el Narco en el Edomex durante su gestión? ¿Atenco? ¿Su galopante incultura? ¿Su falta de propuestas concretas? o ¿Su "inmaculada figura? ¿Su romance de telenovela con "La Gaviota"? ¿La defensa de Loret de Mola? y ¿Ser el "consentido" de Televisa y "La mafia del poder"? ... Tiempo al tiempo.