No hay camino para la verdad, la verdad es el camino
-GANDHI-
"El golpe" a Carmen Aristegui habla de censura y nos hace cuestionarnos sobre el problema de la libertad de expresión en México, porque un país desinformado, es un país condenado al fracaso, al descrédito y a la perdición, de ahí la importancia del tema. La "andanada" en contra de la periodista "incómoda" de México, pone a la mesa la vulnerabilidad de la prensa crítica, pero también las presiones a las que se encuentran sometidos los concesionarios y dueños de los medios.
“Algo muy grave debe haber ocurrido para que estos empresarios (los Vargas, dueños de MVS), siempre atentos, se hayan comportado de esta manera, con virulencia y agresividad, con intención de aniquilar a los periodistas”, aseguró Aristegui en su mensaje vía internet. “Esto no es otra cosa que un intento de golpe”, puntualizó.
Para Aristegui es un retroceso a lo que llamó practicas "Echeverristas". Sin embargo, Jorge Carrasco en PROCESO señala que no se trata de un regreso al autoritarismo, porque de hecho, este siempre ha estado aquí: "El autoritarismo no se ha ido sencillamente porque no hemos evolucionado hacia una sociedad democrática de hecho".
COMPLICIDADES |
La Constitución de Apatzingan de 1814 ponderaba la libertad para hablar y manifestar opiniones mediante la imprenta, sin embargo, en los hechos el periodismo siempre ha sido sometido a la censura y, en sentido opuesto, los "lambiscones" siempre le han rendido tributo al poder y los poderosos. Por ejemplo: La Gaceta del Gobierno de México fue establecida por un grupo de conservadores, cuya misión era defender los intereses de la monarquía, además de ser un vocero de las autoridades de la época (como Televisa o El Sol de México, en estos tiempos).
A lo largo de los siglos XIX y XX el autoritarismo imperó en el Estado mexicano, con lo cual, los medios estuvieron supeditados al sistema. Es por ello que en la actualidad a la prensa le cuesta mucho trabajo ser independiente. Los 70 años del PRI en el poder nos enseñaron a ser comparsa, aplaudidores y alcahuetes, vendidos ¡pues!. A pesar de todo ello, siempre hubo medios "disidentes", respetados y respetables que lucharon contra corriente y un sistema que los quiso someter a toda costa.
En el apogeo del Priísmo y su manera autoritaria de gobernar, en 1976 Luis Echeverría logró la expulsión de Julio Sherer de Excélsior por sus críticas y señalamientos hacia el gobierno que encabezaba. Así nace la controvertida revista PROCESO, básica en la historia reciente para denunciar la corrupción y a los corruptos. Sin lugar a dudas, se trata del medio más incisivo y crítico para el régimen represor, cómplice y criminal.
REPRESOR |
Con Peña Nieto tenemos el más acabado ejemplo de censura con Pedro Ferríz de Con (a quien callaron antes de que este Presidente ascendiera al poder) y, finalmente, la "caída" definitiva de Aristegui de la empresa de la familia Vargas.
Asimismo, no podemos olvidar a la interminable corte complaciente mediática que llevó al PRI de regreso a los Pinos, y que ahí lo sostiene a pesar de su fracaso. Es esta prensa cuestionada, sobre todo la televisión, la que mucho tuvo que ver para "entronizar" al actual Presidente en la "grande", según Jenaro Villamil de PROCESO y el diario británico THE GUARDIAN. De estos hechos fuimos testigos todos ante la desproporcionada, inusual y anómala aparición de EPN en la pantalla chica, desde antes de que fuera Gobernador del Edomex, hasta la construcción de su candidatura presidencial donde nada logró despeinar su relamido y engominado copete.
Pero la prensa transita por otras senderos que trastocan la libertad de expresión. "El soborno, las entrevistas pagadas, los inconfesables intereses creados, la autocensura, el periodismo mercenario, la complicidad de los medios con el poder público o con la iglesia, o con los sindicatos, o los sectores empresariales, o hasta con el narco; son realidades inocultables en la mayoría de los medios de difusión mexicanos", escribió Francisco Martín Moreno.
Pero el escándalo de escándalos, similar por sus niveles y alcances a lo ocurrido con Julio Sherer en los 70, lo representa el caso Aristegui, quien dijo desconocer a Los Vargas con esta actitud desproporcionada:
"...lo que queda claro es que su conducta, lo desmedido, lo desmesurado, lo agresivo, no empata con lo que yo he conocido de ellos".
Yo trabajé en MVS como titular y guionista del noticiario Visión Xtrema, y jamás fui ni censurado, ni sometido, ni presionado, ni nada por el estilo (y miren que cuestionamos y criticamos al Gobierno de Calderón como en pocos medios). Por ello llama tanto la atención lo que han hecho con Carmen y que nos lleva a pensar en un "golpe" gestado desde los Pinos.
La historia de MVS se remonta a finales de los 60 cuando hace su aparición en el campo de las telecomunicaciones y, para mediados de los 70 con "Telerey" ya se había convertido en el primer centro independiente de producción y post-producción de televisión del país. En los 80 ya producía sus propias telenovelas. MVS fue la empresa precursora en televisión de paga vía aérea, primero, y satelital directa al hogar, después.
El crecimiento y éxito de MVS se dio tanto en radio como en televisión, donde voces y figuras de renombre como: José Gutiérrez Vivó, Raúl Peimbert, Fernanda Tapia, Álvaro Cueva, Horacio Villalobos, Pedro Ferríz de Con, Javier Solórzano, Gloria Calzada y Carmen Aristegui, han tenido cabida. MVS se distinguió por su vanguardia y liderazgo tecnológico, pero sobre todo, por su apertura y libertad de expresión.
Sin embargo, todo aquello, todo lo ganado, lo logrado, todo lo vivido, construido y experimentado se desmoronó, se cayó, se vino abajo en un hecho sin precedentes cuando la otrora empresa vanguardista y critica, emprendió la campaña en contra de la mejor periodista, no sólo de su plataforma de noticias, sino de todo el país. Carmen Aristegui le dio mayor prestigio, lucimiento y renombre a una empresa que había luchado, contracorriente, por tener un lugar respetable en el medio.
Yo lamento mucho lo que ha sucedido con MVS, la empresa que durante muchos años fue el contrapeso de la televisión abierta y oficialista. El medio que siempre había sufrido y soportado la presión gubernamental, como lo reconociera el mismo Joaquín Vargas, en aquel intento de censura por parte del gobierno de Felipe Calderón en contra de Aristegui, donde estuvo en juego la famosa banda 2.5 GHZ, y toneladas de dinero en un proyecto que, hasta ahora, no había podido ver la luz por impedimentos directos desde los Pinos.
Es por ello que ahora no podemos dejar de lado el contexto en el cual se ha dado la salida de Carmen de MVS. Según Jenaro Villamil en PROCESO, la empresa de comunicación participaría en una próxima licitación de la red compartida ante la SCT, con una inversión de más de 10 mil millones de pesos, para competir con Slim. Por otra parte, también despierta sospechas el hecho de que el escándalo estallara poco después de que el ex abogado de MVS, Eduardo Sánchez, asumiera la Coordinación General de Comunicación Social de la Presidencia.
Mención aparte merece el nombramiento de Andrés Chao en 2014, como Subsecretario de Normatividad de Medios en Gobernación. Andrés Chao antes se desempeñaba como Director General de Radio, Televisión y Cinematografía de la SEGOB. Por "coincidencia", el funcionario es hermano de Felipe Chao, vocero de MVS.
Muchos claroscuros en este caso, mucho que analizar, leer, discutir, debatir, investigar, indagar, escuchar, porque no es poca cosa, porque se trata de defender "nuestra libertad", como bien dijo Aristegui, la libertad de hablar, expresarse y disentir ante un gobierno deshonesto, omiso, autoritario, criminal, corrupto y represor, que no acepta que se le moleste ni con el pétalo de una critica, mucho menos con una denuncia como la Casa Blanca. Porque ante hechos de esta dimensión y naturaleza, como el 2 de octubre: NI PERDÓN NI OLVIDO.
Asimismo, no podemos olvidar a la interminable corte complaciente mediática que llevó al PRI de regreso a los Pinos, y que ahí lo sostiene a pesar de su fracaso. Es esta prensa cuestionada, sobre todo la televisión, la que mucho tuvo que ver para "entronizar" al actual Presidente en la "grande", según Jenaro Villamil de PROCESO y el diario británico THE GUARDIAN. De estos hechos fuimos testigos todos ante la desproporcionada, inusual y anómala aparición de EPN en la pantalla chica, desde antes de que fuera Gobernador del Edomex, hasta la construcción de su candidatura presidencial donde nada logró despeinar su relamido y engominado copete.
AUTORITARISMO |
Pero el escándalo de escándalos, similar por sus niveles y alcances a lo ocurrido con Julio Sherer en los 70, lo representa el caso Aristegui, quien dijo desconocer a Los Vargas con esta actitud desproporcionada:
"...lo que queda claro es que su conducta, lo desmedido, lo desmesurado, lo agresivo, no empata con lo que yo he conocido de ellos".
VISIÓN XTREMA |
La historia de MVS se remonta a finales de los 60 cuando hace su aparición en el campo de las telecomunicaciones y, para mediados de los 70 con "Telerey" ya se había convertido en el primer centro independiente de producción y post-producción de televisión del país. En los 80 ya producía sus propias telenovelas. MVS fue la empresa precursora en televisión de paga vía aérea, primero, y satelital directa al hogar, después.
El crecimiento y éxito de MVS se dio tanto en radio como en televisión, donde voces y figuras de renombre como: José Gutiérrez Vivó, Raúl Peimbert, Fernanda Tapia, Álvaro Cueva, Horacio Villalobos, Pedro Ferríz de Con, Javier Solórzano, Gloria Calzada y Carmen Aristegui, han tenido cabida. MVS se distinguió por su vanguardia y liderazgo tecnológico, pero sobre todo, por su apertura y libertad de expresión.
AUDACIA |
Hoy MVS así se expresa de su ex empleada: “Carmen Aristegui miente y falta a la ética... Está visto Carmen que tu nivel de autocrítica excluye siempre la posibilidad de reconocer cuando te equivocas”. Estas declaraciones se dan ahora que la periodista ha dado a conocer la censura por parte de la empresa, ante la investigación más impresionante que ha visto la luz en México en los años recientes. La Casa Blanca cimbró a los Pinos, le dio un golpe, tan bajo que no ha podido (ni podrá), reponerse del mismo.
EN LA CASA BLANCA |
Leo Zuckerman ha insistido en el hecho de que dicha investigación es tan grande como la del Watergate norteamericano que derrocó a Richard Nixón. Sin embargo, aquella denuncia no hubiera visto la luz pública sin el apoyo que tuvieron los periodistas, Bernstein y Woodward del director editorial del Washington Post, Ben Bradlee, y la dueña del periódico, Katharine Graham. Ambos, como aquí los Vargas, fueron presionados para “matar” la historia.
CAÍDA |
"En cualquier otro país donde se practica la democracia se valora el talento de periodistas de la talla de Carmen Aristegui y se tiene conciencia del compromiso de sus reporteros", apuntó la conocida, reconocida y querida, Elena Poniatowska.
Yo lamento mucho lo que ha sucedido con MVS, la empresa que durante muchos años fue el contrapeso de la televisión abierta y oficialista. El medio que siempre había sufrido y soportado la presión gubernamental, como lo reconociera el mismo Joaquín Vargas, en aquel intento de censura por parte del gobierno de Felipe Calderón en contra de Aristegui, donde estuvo en juego la famosa banda 2.5 GHZ, y toneladas de dinero en un proyecto que, hasta ahora, no había podido ver la luz por impedimentos directos desde los Pinos.
VENGANZA CALDERONISTA |
Mención aparte merece el nombramiento de Andrés Chao en 2014, como Subsecretario de Normatividad de Medios en Gobernación. Andrés Chao antes se desempeñaba como Director General de Radio, Televisión y Cinematografía de la SEGOB. Por "coincidencia", el funcionario es hermano de Felipe Chao, vocero de MVS.
CORRUPCIÓN |