CURZIO y la Censura del PRI.

"La verdad no peca pero incomoda"

-Dicho popular-

Con el regreso del PRI al poder, volvieron todas las calamidades, las mañas, corruptelas, crímenes y la censura que siempre ha caracterizado a este instituto político. Así fue en el siglo XX, por lo tanto, no tendría porque ser distinto en el XXI. Con la salida de Leonardo Curzio del noticiario Enfoque del grupo Radio Mil, se alarga la lista de comunicadores censurados por decir verdades y por no tener la simpatía del régimen Priísta. Pedro Ferríz de Con, Carmen Aristégui y Brozo, son tres de los periodistas que encabezan dicho listado.

Según Curzio, se le pidió la cabeza de dos de sus colaboradores estelares: María Amparo Casar y Leonardo Raphael quienes todos los jueves tenían la tertulia política donde desmenuzaban los entretelones de este rubro en México y el mundo. El periodista se negó a desaparecer dicha tertulia y a cortar las cabezas a sus prestigiados analistas.

En un arranque de integridad, honestidad, ética y moralidad, el también colaborador de Primer Plano de Canal Once, tomó la decisión de irse de la estación y de su espacio de noticias, que a lo largo de muchos años había logrado colocar en el gusto del público.

En la última emisión de la tertulia política, tanto Curzio como Casar y Raphael, criticaron fuertemente al PRI y su maniquea y conveniente iniciativa de quitarle el presupuesto público a los partidos políticos.

Con esto queda claro que Enrique Peña Nieto miente cuando dice que en México hay libertad de expresión. De acuerdo con Artículo 19, ya son 36 los periodistas asesinados durante el sexenio Peñanietista. Estos crímenes, aunados a la salida del aire de locutores y periodistas como Curzio, describen cabalmente la falta de libertad de prensa que prevalece en nuestro país, donde ejercer el periodismo, se ha convertido en una labor de riesgo y peligro constantes, donde el acoso del gobierno y sus huestes, están a la orden del día. Para muestra, muchos botones.

A mi, de manera particular, me gusta mucho el estilo de Leonardo Curzio. Su facilidad de palabra, cultura, certeza, equilibrio y seriedad, me ayudan a comprender mejor el entramado político de México. Su espacio radiofónico hará falta en la contienda electoral del 2018.

Y es que la realidad de México, desde que regresó el PRI al poder, no es nada alentadora. A pesar de que en su 5to. informe Peña haya hablado de un país más semejante a Suecia o Dinamarca, la verdad es que el retroceso en todos los aspectos es evidente y por ello la popularidad del Primer Mandatario está por los suelos (19% de aprobación según Consulta Mitofsky), y por ello, el triunfo del tricolor el año que entra, se antoja imposible.

Más de 100 mil asesinados fruto del crimen organizado, 53 millones de pobres según el Coneval, la inflación más alta en los últimos ocho años (de acuerdo con el INEGI), y la corrupción galopante de políticos, en su mayoría Priístas, encabezados por el mismísimo Enrique Peña Nieto y su célebre Casa Blanca, no hablan de un país exitoso, sino de todo lo contrario.

En educación, de acuerdo con la OCDE, más de la mitad de la población adulta sólo llega hasta secundaria. Ya de los asesinatos y desapariciones de mexicanos en Tlatlaya, Tanhuato y Ayotzinapa, a manos de fuerzas federales, mejor ni hablamos. ¿Y qué tal los casos de Higa, OHL y Odebrecht? En resumen, México está reprobado en casi todos los rubros y mucha de la responsabilidad recae en el régimen Priísta que encabeza Enrique Peña Nieto.

Si decir estas y otra cosas causan escozor en el PRI y el Presidente emanado de sus filas, es porque son verdades y, como reza el dicho: la verdad no peca pero incomoda. Al margen de los medios a modo, de los aplaudidores y alcahuetes, los periodistas tenemos la obligación y el compromiso profesional y moral de decir estas verdades, aunque sea la última vez ¿no es así Leonardo Curzio?